Los resultados de este domingo, dan cuenta de otro duro revés para el saencismo en Capital y puede resentir la alianza entre los oficialismos provincial y municipal. ¿Quiénes son los padres de esta derrota?
Las elecciones legislativas nacionales volvieron a golpear a las estructuras oficialistas en Salta y La Libertad Avanza, les asestó una nueva derrota en Capital, al igual que en los comicios provinciales de mayo pasado, cuando se quedó con la senaduría departamental.
Los números son contundentes: en la categoría de senadores nacionales, LLA logró un 47,42 % de los votos (142.849) en Salta Capital, frente a una magra cosecha del 25,06% (75.508 votos) de Primero los salteños. Una ventaja superior a los 22 puntos, a pesar de haber del costoso despliegue publicitario, de cartelería y de recurso humano que la lista del poncho puso en la calle.
Como se sabe, tras las elecciones provinciales del 11 de mayo, en las que Roque Cornejo (LLA) ganó la senaduría, el intendente Emiliano Durand, fue señalado como responsable político de los resultados negativos para el oficialismo provincial.
En esta ocasión, Emiliano Durand volvió a quedar en el centro de los cuestionamientos y la tensión podía percibirse a simple vista en la tarima del acto que se realizó en el hotel Alejandro I.
No obstante, hay quienes advirtieron que hubo un golpe de timón en el comando de campaña y fue el coordinador administrativo del Gobierno, Nicolás Demitrópulos, el que ejerció la jefatura de campaña en la Capital, marcando una impronta disciplinaria marcada por el rigor y la presión, aunque sin poner la cara.
En cualquier caso, con un comando compartido o ejercido por cualquiera de las dos caras visibles del oficialismo en la Capital, la derrota fue aún más dura que la de mayo y sólo se disimuló con la importante conquista de haber alcanzado el objetivo de ingresar al Senado nacional.
Pese a ese objetivo consumado, la desconfianza del Grand Bourg hacia el CCM (Centro Cívico Municipal) quedó sembrada y puede generar rispideces.


