La denuncia por violencia contra el concejal Pablo López salpica a la diputada nacional Emilia Orozco, señalada como posible conocedora previa de los hechos denunciados.
La denuncia contra el concejal libertario Pablo López por abuso, extorsión y violencia de género sigue sacudiendo a La Libertad Avanza Salta. Pero ahora, un nuevo elemento vuelve aún más explosivo el caso: en el escrito judicial presentado por la víctima, aparece el nombre de la diputada nacional Emilia Orozco, señalada como una de las personas que habría conocido los hechos.
Orozco, quien presidió la Comisión de Mujeres durante su paso por el Concejo Deliberante, fue mencionada por la denunciante —expareja y exmilitante del espacio— como parte del círculo político que sabía del accionar violento de López. Según consta en la presentación, “gran parte del partido sabía lo que vivía”, y Orozco incluso habría desestimado sus denuncias en conversaciones privadas, calificándola de “loca”. Esta expresión fue atribuida al militante Matías “Tute” Corradi, quien habría sido testigo de varias de esas instancias.
El relato judicial detalla una escalada de violencia por parte del concejal, que incluyó maltrato psicológico, económico, físico y sexual. La denunciante afirmó haber sufrido amenazas, exigencias sexuales para “retribuir” la ayuda política y la retención de parte de su sueldo como asesora. Asegura que existen transferencias bancarias que pueden comprobar parte de sus dichos.
Frente a la conmoción por las implicancias políticas del caso, Emilia Orozco difundió un comunicado donde sostuvo: “No vamos a encubrir a nadie, no somos como los otros espacios”. Remarcó que la renuncia de López fue inmediata y por pedido de La Libertad Avanza. No negó explícitamente haber estado al tanto de las situaciones denunciadas, pero pidió que se respete la presunción de inocencia y reclamó celeridad judicial “incluso si se tratara de una falsa denuncia”.
El caso ya generó repercusiones dentro del espacio libertario salteño, donde se multiplican las tensiones internas y se profundiza la crisis de imagen.