El Foro de Davos reúne jefes de Estado, líderes políticos, empresas, sociedad civil entre otros, de todo el mundo para proyectar y plantear los principales desafíos globales. Durante su intervención en el Foro Económico Mundial, el presidente aseveró que la ideología woke es un virus mental, un cáncer que hay que extirpar.
El término woke es de origen afro-americano. En 1940, se consideraba woke a una
persona que era consciente de las injusticias en la sociedad y que actuaba en consecuencia.
Según estos ideales, esta cultura busca la transformación a una sociedad inclusiva en donde la condición racial, económica o cultural no sean condicionantes para gozar de igualdad como personas. Se puede decir que estas ideas se apoyan en las teorías del neomarxismo y marxismo cultural.
Para llegar a esa sociedad igualitaria la ideología woke busca censurar al sector privilegiado de la sociedad. Así surge una nueva cultura asociada a esta, la denominada “cultura de la cancelación”. Tanto así que la cultura woke ha impregnado sus valores y la cancelación o condena social de todas aquellas personas que sean consideradas homófobas o racista, sin oportunidad de defenderse.
En este sentido Milei aseguro que esta hegemonía a nivel global se ha ido desquebrajando con el apoyo y avance de los mandatarios que pregonan las ideas de la libertad, menciono así el apoyo de países como Estados Unidos, Israel, Hungría y magnates de la economía mundial como Elon Musk.